Archivo mensual: diciembre 2011

Proyecto de Construcción de la sede de Radio Wa

Antecedentes
Radio Wa (“Nuestra Radio” en la lengua Luo) es una emisora comunitaria iniciada por la diócesis católica de Lira en el año 2001 con el objetivo de ser una fuente de información, educación y concienciación social sin afán de lucro. Su objetivo principal en la promoción de valores sociales como la participación ciudadana, la construcción de la paz, la justicia, la tolerancia y el diálogo, contribuyendo activamente a la reconstrucción de esta sociedad, afectada por largos años de conflicto armado generado por la guerrilla del LRA (Ejército de Resistencia del Señor).

La radio cuenta con un grupo de 25 personas en plantilla (casi todos a tiempo parcial) y un grupo de 36 “comunicadores sociales”, voluntarios repartidos por los diferentes núcleos de población de la región que actúa como reporteros de noticias y eventos locales. Técnicamente, la radio cuenta con un transmisor de 4Kw de potencia y un radio de cobertura de 150-200Km en torno a la ciudad de Lira (ver mapa).

Este mapa muestra la ubicación de Lira y el alcance de la señal radiofónica

Sus oficinas están en unas dependencias pertenecientes a los salones parroquiales de la Catedral de Lira, ocupando una superficie de 100 metros cuadrados, con un único estudio de reducidas dimensiones y con grandes limitaciones de espacio físico.

El proyecto tendrá lugar en Lira (población de 80,879, según el censo de 2002), la ciudad principal del Norte de Uganda y la cuarta mayor en el país. Dista 340 Km de Kampala, la capital de Uganda. Lira es la ciudad principal de la sub-región Lango que cuenta con 8 distritos (Lira, Apac, Dokolo, Oyam, Alebtong, Otuke, Amolatar y Kole). Según el último censo, la sub-región tiene una población de más de 1’5 millones de habitantes, lo cual significa que después de aplicar la media de crecimiento la población en 2011 debe haber alcanzado más de 2 millones de personas.

Objetivos generales y específicos
El objetivo a cumplir sería una mejora en el desempeño y el impacto de la radio comunitaria Radio Wa en términos de producción, eficiencia y calidad gracias a la mejora de su capital físico. Para alcanzar este objetivo general, se hace necesaria la construcción de un edificio adecuado a las necesidades, número de personal y actividades de la emisora. El edificio en cuestión tendría un dos pisos (bajo y primero) y una superficie utilizable de 440 metros cuadrados en un terreno propiedad de la diócesis de Lira.

Resultados Previstos
Los resultados previstos son los siguientes:

  • El personal de Radio Wa será capaz de llevar a cabo sus actividades de documentación, información, producción y edición de una manera más efectiva al contar con un espacio adecuado.
  • Debido a las nuevas y más amplias instalaciones radiofónicas, un mayor número de personas podrán participar en programas y ser protagonistas de los mismos.
  • Los programas mejorarán en cantidad (al haber más posibilidad de espacios de grabación y producción) y en calidad (al contar el edificio con estudios y oficinas más adecuados para el tipo de actividades que se llevan a cabo)

Previsiones tras la finalización del proyecto
Se prevé que después de haber finalizado el proyecto, la emisora será capaz de mejorar sus capacidades de producción de programas, habrá más posibilidades de que la comunidad participe en los programas gracias a mejores y más amplias instalaciones y el impacto de sus programas será mayor al poder contar con medios técnicos más adecuados.

Población Beneficiaria
Dada la naturaleza de las actividades llevadas a cabo por la emisora, el número de beneficiarios directos e indirectos depende no de las intervenciones en sí de la contraparte local en Uganda sino de la disponibilidad de los beneficiarios para beneficiarse de las actividades y programas llevados a cabo por Radio Wa. Habiendo expresado esta premisa, podemos hacer la siguiente estimación:

  • Beneficiarios directos:
    • Personal de Radio Wa (más de 30 personas)
    • Comunicadores Sociales de la sub-región Lango (36 en la zona)
    • Grupos sociales más vulnerables (niños, mujeres, personas afectadas por hechicería, grupos con
      especiales necesidades de concienciación cívica e información legal, prisioneros, etc.)
  • Beneficiarios indirectos:
    • Personas y grupos con necesidad de diseminar información (30 anuncios por día)
    • Oyentes de Radio Wa y sus familias (audiencia potencial de 2 millones de personas)

Coste del proyecto

  • Presupuesto global: 119.269’3 €
  • Solicitado a Diputación de Jaén: 25.000 €
  • Aportación de O.N.G.D. Solicitante: 2.500 €
  • Otros (por confirmar)

Coste aprobado

  • Diputación Jaén: 8.750 €
  • Latiendo con el Sur: 1.000 €
  • Otros (por confirmar)

LOS IMPRESCINDIBLES

En estos días nos ha visitado un matrimonio de Ecuador que conocimos hace muchos años y con los que hemos compartido parte de nuestra historia personal. Ella, Chela, desde que la conocemos ha estado dando su tiempo, sus recursos y su saber a las comunidades campesinas e indígenas de todo el Ecuador. Se ha dedicado sobretodo a acompañar los procesos de los grupos campesinos y de mujeres. Ha luchado codo con codo con sus dirigentes para conseguir mejoras para las comunidades rurales, ha enseñado a muchas generaciones a luchar por sus derechos, a valorar la tierra y a rescatar los conocimientos ancestrales, a sembrar y cuidar los cultivos andinos, a conocer las leyes que gobiernan su país y a poner en práctica lo justo de ellas, denunciando siempre lo injusto de las mismas. En estos últimos años está luchando en Ecuador contra la política minera que está desplegando el gobierno actual de Correa, política que está invadiendo tierras, contaminando ríos, despojando a los pobladores de su espacio vital y trayendo a la zona de la sierra la violencia, la inseguridad y la destrucción del medio ambiente de una de las regiones más bellas del planeta. Este compromiso que ella ha vivido siempre como una opción de vida, le ha traído problemas hasta el punto de haber recibido amenazas para obligarla a dejar de lado estas actividades. Últimamente hasta le ofrecieron un alto puesto en el MIES (Ministerio de Inclusión Económica y Social), puesto que rechazó por no traicionar sus principios. Principios que la han hecho ser quien es, entre ellos está su fe, su deseo de seguir sirviendo a los demás, de ser samaritana entre los suyos llevando el mensaje siempre actual de Jesús de Nazaret.
En este largo camino se encontró con Koldo, misionero español que llegó a Ecuador para dar parte de su vida. Se conocieron y se enamoraron. Desde entonces él adoptó a este país como patria y a Chela como compañera de fatigas y alegrías. Juntos han seguido compartiendo sus ideales hasta el día de hoy. Koldo se interesó por la agricultura y estudió para poder ayudar a los campesinos a mejorar su producción, su tierra, en definitiva sus vidas y la de los suyos. Se especializó en agroecología y ha impulsado este tema hasta el punto de poner en marcha varios mercados de productos ecológicos donde no hay intermediarios y la producción llega al consumidor a buenos precios. Está convencido de que si mejora la alimentación evitando pesticidas y otros productos que ya sólo se usan en los países del Sur, mejorará la salud y la calidad de vida de los habitantes de estas tierras.
El reencuentro con ellos ha sido agradable, hemos recordado muchas experiencias vividas en la sierra ecuatoriana: las mingas o trabajo gratuito de las personas que componen las comunidades de allá, la capacitación de las madres de las guarderías, la formación de los campesinos, las marchas para reclamar mejoras, .. y sobretodo las horas de amistad compartidas. Hoy hablando con ellos recordábamos las frases de Bertolt Brecht que musicó Silvio Rodriguez hace bastantes años: “Hay hombres que luchan un día y son buenos; hay otros que luchan un año y son mejores; hay otros que luchan muchos años y son muy buenos. Pero están los que luchan toda la vida y esos son imprescindibles”.
Hemos conocido a mucha gente que se comprometió, que se entregó por lo que creía, que luchó tenazmente, pero que el paso del tiempo desgastó su energías, quemó su ilusión y se acomodó en el conformismo resignándose y claudicando ante la realidad de injusticia y desigualdad imperante, mimetizándose con el sistema, olvidando la austeridad y el estar permanentemente al lado del pobre, del que menos puede, viendo a Cristo encarnado y sintiendo su frío, su hambre y sus sufrimientos. Sin embargo Chela y Koldo, junto a otros tantos valientes, aún se dejan la vida en el camino renunciando a seguridades, comodidades, estatus, poder o reconocimiento, son los verdaderamente “imprescindibles”, pues sin ellos en este mundo gobernado por el mercado y sus lacayos no habría luz ni esperanza, no habría un camino que seguir, no habría Utopía.

Manuel Grau: Misionero en Costa de Marfil

Desde la Misión Católica Saint Paul de Dianra, en Costa de Marfil, nos escribe Manuel Grau, misionero de la Consolata sevillano, él junto a Pietro Villa realizaron animación misionera durante años por las parroquias de Jaén, ahora nos comparte sus vivencias.

“Cuando os escribí la última vez, el país acababa de salir de una grave crisis que terminó con la victoria del actual gobierno, reconocido ganador de las elecciones también por la comunidad internacional. Desde principios de abril estamos oficialmente en paz, pero la realidad es siempre más compleja. El país se está poniendo lentamente en marcha después de diez años de crisis. El gobierno quiere dar una imagen de normalidad y de trabajo serio aunque los obstáculos parecen todavía muy grandes. La región sudoeste del país, la más castigada en el pasado conflicto, no está del todo pacificada. Hay un conflicto étnico latente complicado con la ocupación de tierras de cultivo por inmigrantes extranjeros de los países limítrofes. Hay todavía muchos refugiados, especialmente en Liberia, que no han vuelto a sus casas por miedo a extorsiones y venganzas. El gobierno hace llamadas continuas a todos los exiliados para que regresen. Se acaba de poner en marcha la comisión ‘Verdad y Reconciliación’, con una fuerte presencia de líderes religiosos.

Nosotros afrontamos el nuevo curso con el equipo de misioneros reducido a dos. El padre Ariel nos ha dejado para hacer estudios de especialización y nosotros esperamos un refuerzo que, si llega, tardará un poco. Mientras tanto, estamos relanzando las actividades e iniciativas de los años pasados: evangelización, salud, alfabetización, microcrédito. Con este curso que comienza, nuestra parroquia celebra sus diez años de vida. Esta celebración estará presente en todos los ámbitos de nuestra vida y actividades. Es una buena ocasión para dar gracias a Dios por todo el camino hecho, por los que han sembrado y construido antes que nosotros, especialmente en los años difíciles de la guerra. Es también el momento para mirar más a fondo esta realidad que tenemos delante donde Dios nos está indicando un camino, al mismo tiempo que nos hace comprender que es El quien lleva el timón de la barca. Hay una parte grande de nuestro territorio donde no estamos presentes ni con presencia de evangelización ni con iniciativas de promoción humana y social. También aquí la misión es un ir siempre ‘más allá’ y tal vez sea este el desafío mayor en esta celebración de los diez años.

Las necesidades son muchas, especialmente en el campo de la salud y de la instrucción. No se trata solo de disponer de una escuela cercana, sino de hacer comprender la necesidad de enviar a los niños a la escuela.

En el campo de la salud se mezclan aun más las precarias condiciones de vida y de higiene con costumbres y creencias ancestrales. La gente busca curación y bienestar por todos los medios a su alcance: medicina tradicional de los curanderos, vendedores sin escrúpulos que venden medicinas como golosinas, sin ninguna garantía, medicina ‘moderna’ de los dispensarios y mucha religiosidad en clave de curación. Muchos se acercan también a la vida cristiana buscando curación en el cuerpo y en el espíritu, cansados de ir de un lado para otro. Mucha gente muere sin saber de qué. Continuamente nos piden oraciones por la salud y bendiciones.

En medio de todo esto, el Evangelio va haciendo su camino, lentamente, humildemente, tanto, que a veces no se ve nada y todo parece esfuerzo inútil. De vez en cuando una palabra, un gesto, una confidencia, un encuentro casual, te hacen sentir que no es así. Puede ser un joven que se prepara al bautismo y que cuenta como la fe le ha cambiado la vida; o una mujer sencilla y poco instruida que está mejorando la vida de su familia gracias al microcrédito, o un catequista que hace kilómetros en bicicleta o en moto para evangelizar en otros poblados. Aquí hace falta lo que algún autor ha llamado una ‘mística de ojos abiertos’, para descubrir la vida con toda su riqueza y todos sus dramas y como Dios está haciendo posible esta vida e invitando a hacerla plena, verdadera y auténtica. A veces son los no cristianos los que te hacen comprender el valor de una presencia. La misión es aquí, más que nunca, experiencia de debilidad y de fortaleza, de vasija de barro frágil y de tesoro escondido, saber ver y saber estar.

Os deseamos a todos que encontréis vuestro lugar y vuestra tarea en esta familia de Dios y en esta misión que es también vuestra.”

Hasta aquí las palabras de este amigo, que siembra en una tierra árida donde empiezan a crecer brotes de esperanza.